Ryse: Son of Rome

Uno de los juegos más bonitos de la década. Sumérgete en un viaje por una Roma de fuego y sangre. ¡El paisaje es precioso y lo disfrutarás sin duda si te sientes un verdadero centurión! Te esperan multitud de combates tácticos y rítmicos. Si te gustan las ejecuciones espartanas de 300 y los combates de Gladiator, aquí encontrarás la felicidad. ¡Simplemente sublime!

¿Siempre has querido unirte al ejército romano, pero desgraciadamente has nacido 2000 años tarde? Ryse: Son of Rome cumplirá ese inquietante sueño.

Ryse: Son of Rome es un "beat'em all" que te pone en la piel de Marius, un miembro del todo poderoso ejército romano. Su último deseo es vengar la muerte de su familia, lo que realmente suena a pretexto, pero, bueno, recordemos que algunos de los mejores "beat'em all" de la historia te pedían que fueras a salvar a tu chica.

Por lo tanto, la historia de Ryse: Son of Rome no es el verdadero núcleo del juego. Lo que más destaca al terminar Ryse: Son of Rome son sus excepcionales gráficos. Al igual que Assassin's Creed, el juego es ultrarrealista y te sumerge en una arquitectura romana impresionante y los rostros de los personajes también son más que impresionantes.

Pero el realismo en la antigua Roma con una espada en la mano es sinónimo de sangre. Y en ese aspecto, el juego es totalmente realista.
A Marius, nuestro héroe, le apasiona cortar brazos y, lo menos que podemos decir es que se entrega a su pasatiempo favorito siempre que tiene ocasión. En un tono más serio, el juego es bastante gore, hasta el punto de que fue calificado como PEGI 18 cuando salió a la venta.

Como decíamos antes, el juego es un "beat'em all", lo que significa que tendrás que acabar con todos los bárbaros que te encuentres. Cuando un enemigo está cerca de morir, puedes ejecutarlo, un poco como en For Honor o Assassin's Creed. Y, como es habitual en el mundo de los videojuegos que los enemigos dejen bonificaciones al morir, Ryse: Son of Rome te permite incluso elegir qué bonificaciones podrás obtener. Durante los combates, la cruz direccional de tu mando (el botón en forma de +) te permite seleccionar el medidor que quieres mejorar. Tienes la posibilidad de elegir entre ganar vida, experiencia, daño o "rabia". No, Marius no empezará a babear cuando la barra de rabia esté llena, es simplemente una bonificación de combate, un poco como la poción mágica para los romanos invencibles.

En resumen, si te gustan los juegos espectaculares y te consideras un verdadero centurión, lo único que tienes que hacer es ponerte la toga y no soltar nunca la espada para cumplir por fin el sueño de toda tu vida de formar parte del ejército de Roma.
"SPQR"...

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