NecroVisioN: Lost Company

La secuela de NecroVisioN, pero esta vez jugarás como Zimmerman, el villano de la anterior entrega. Seguirás su viaje, el descubrimiento de sus poderes y su paso al lado oscuro. La novedad de esta entrega radica en su rica jugabilidad: podrás volar, pilotar tanques e incluso jugar con toda una compañía de soldados. ¡Un asesino en todo el sentido de la palabra!

Te presentamos la secuela del excelente FPS NecroVisioN. No es realmente una secuela porque es una precuela en la que interpretas al villano del primer episodio: Zimmerman. Este nigromante también comienza su aventura en Verdún. Corre el año 1916 y descubre una especie de "peste" que transforma a sus camaradas soldados en muertos vivientes hostiles. Entonces trata de huir de este infierno para avisar a sus superiores y preparar una vacuna.

A medida que Zimmerman se sumerja poco a poco en la oscuridad y se enfrente a una horda de zombis y demonios, se pasará al lado oscuro... De ti depende averiguar cómo.

A los amantes del primer NecroVisioN, que son muchos, les encantará.

Aquí la carnicería comienza desde el primer nivel, mientras que en NecroVisioN tenías que esperar un poco para que empezara la acción, frenética y sangrienta.

El nuevo bestiario es muy simpático, con sus peludos con doble bayoneta, su cirujano/carnicero, su enfermera o incluso sus escoceses con kilt... sin olvidar al hombre lobo, que es sencillamente impresionante (casi tanto como los vampiros del primer NecroVisioN).

En cuanto al arsenal, encontramos casi todas las armas de la primera entrega, más otras 6 nuevas armas devastadoras, ¡incluido un lanzacohetes, nada más y nada menos!

En cuanto a la jugabilidad, los combos son muy entretenidos (patadas encadenadas con disparos a la cabeza, etc.), los gráficos son agradables, la banda sonora es estupenda, la sensación de las armas es excelente. En resumen, The Farm 51, estudio checo sin pretensiones, firma aquí una excelente continuación que hará las delicias de los aficionados al standalone gore y fuera de lo común.