Bang-On Balls: Chronicles

¡Atención, obra maestra! Al principio parece tratarse de un simple juego de plataformas, pero enseguida nos sumergimos en un universo donde nuestra colorida bolita se convierte en un auténtico héroe de acción RPG. Puede saltar, aspirar objetos al estilo Kirby, interactuar con su entorno e incluso explorar cuatro mundos abiertos con su dosis de humor absurdo. ¡Absolutamente genial!

Ojo, ¡esta pequeña obra maestra bien merece la pena la distracción! Bang-On Balls: Chronicles no es un simple juego de plataformas, acción y aventura. Es un gran éxito en todos los niveles. Te metes en el papel de una bola y te encuentras en un estudio de cine lleno de divertidísimas misiones y emocionantes desafíos.

Una de las primeras cosas que llama la atención de Bang-On Balls: Chronicles es la calidad de sus gráficos. Cada mundo está muy bien detallado, es vibrante y tiene mucha vida. Está claro que los desarrolladores de Exit Plan Games han puesto mucho amor y esmero en la creación de estos entornos inmersivos. Tanto si ruedas por paisajes vikingos como si exploras escenarios de la Segunda Guerra Mundial, cada nivel es un festín visual.

Nos ha gustado: la posibilidad de personalizar tu personaje con los colores de tu país preferido. ¿Eres español, australiano o japonés? La gama de opciones es impresionante, y algunos países ofrecen incluso varios aspectos diferentes. Por ejemplo, puedes llevar con orgullo los tres colores de la bandera italiana o adoptar la apariencia de un ciudadano del Imperio Romano. ¿Mola, no?

Nos ha encantado: su lado "Collect-a-Thon". Desde peinados de geisha hasta trajes de limón, puedes descubrir cientos de atuendos en los escenarios, comprarlos con la moneda del juego o hacerte con los de enemigos especiales. Los accesorios no son solo estéticos; muchos de ellos añaden habilidades especiales o mejoran tus estadísticas.

Pruébate diferentes conjuntos para encontrar los que mejor se adapten a tu estilo de juego.

Además de los atuendos, puedes coleccionar carretes de películas para completar los escenarios de los sets de rodaje.

En cuanto a la jugabilidad, es tan intuitiva como adictiva. Controlas una bola que puede esprintar, golpear, protegerse con un escudo, realizar un doble salto, estamparse contra el suelo y aspirar los objetos que la rodean. También tienes acceso a un arma a distancia para enfrentarte a tus enemigos. Además, la jugabilidad principal está continuamente llena de sorpresas. Por ejemplo, puedes transformarte en una rueda para misiones específicas, o destruir barcos hundiendo sus mástiles.

Nuestra parte favorita es el componente de mundo abierto del juego. Te encuentras en un enorme terreno de juego en el que tal vez quieras enfrentarte a un jefe, mientras que una misteriosa cueva cercana puede llamar tu atención y atraerte hacia una nueva aventura. El juego no sigue un hilo rojo estricto, así que desde el principio eres libre de aventurarte por diferentes escenarios, desde los vikingos hasta Japón, cada uno de los cuales ofrece un mundo gigantesco y con muchos detalles que explorar. Aunque hay objetivos principales, como el de llegar a un jefe y derrotarlo, la verdadera diversión reside en la exploración y en descubrir los secretos ocultos.

Nuestro consejo: busca los pasadizos secretos. Los desarrolladores han escondido muchos pasadizos secretos y zonas ocultas. No tengas miedo de rodar contra las paredes y comprobar cada rincón. A veces, los objetos más preciados se esconden detrás de los decorados o de puertas secretas.

Ya sea en modo para un jugador o multijugador local, este juego consigue cautivar a todos los jugadores y transportarlos a una aventura cinematográfica inolvidable. Si te gustan los juegos de plataformas y buscas algo nuevo y emocionante, sumérgete en este universo hilarante y cautivador.