Ash of Gods: The Way

Bastante más accesible que "Ash of Gods: Redemption", "The Way" tiene lugar en el mismo mundo pero con una historia y personajes distintos. Finn es un joven llamado a dominar "El Camino", un juego mortal, para salvar a su país de una amenaza inminente. Nos han gustado los combates tácticos y la profundidad del sistema de deckbuilding que ofrecen una experiencia top para los amantes del género.

¡Sumérgete en el corazón de un mundo en el que el transcurso de las batallas las decide un juego de cartas mortal! En Ash of Gods: The Way, encarnas a Finn, un joven que se enfrenta a la urgente tarea de aprender los entresijos del juego llamado “El camino” para proteger a su patria de una amenaza inminente. Mientras la región vecina de Frisia se prepara para atacar, Finn debe convertirse rápidamente en un experto en el juego, capaz de guiar al ejército de su país hacia la victoria.

Que no cunda el pánico: no necesitas haber jugado al primer juego de Ash of Gods para sumergirte en The Way, cuya jugabilidad es mucho más fácil de pillar.

En esta aventura, te toparás con muchos giros del destino y te enfrentarás a elecciones moralmente complejas que tendrán un impacto directo en el transcurso de tu partida. Cada decisión que tomes influirá en el destino de Finn y de quienes le rodean, determinando así el desenlace de tu aventura.

En Ash of Gods: The Way, la alianza entre el RPG táctico y el deck builder ofrece una experiencia de juego dinámica y estratégica. En el corazón de esta fusión están las cartas, que representan tanto a tus unidades como a las bonificaciones tácticas, que dan forma a cada batalla según los parámetros de la partida.

En cada turno, debes elegir detenidamente qué cartas jugar, ya sean unidades para reforzar tu posición o artefactos que te den una ventaja estratégica. El número de cartas disponibles en tu mano varía según los parámetros de la partida, lo que añade una dosis extra de estrategia a cada decisión.

Una vez que hayas hecho tus elecciones, pasa tu turno, y deja que los acontecimientos se desarrollen en el campo de batalla. Las unidades se mueven por su cuenta, atacando y recibiendo daños, mientras que tu estratega, situado al final de tu línea, permanece en un segundo plano, pero es crucial para tu éxito. Tu objetivo es sencillo pero exigente: eliminar al estratega enemigo protegiendo al tuyo a toda costa.

Cada unidad tiene habilidades específicas que influyen en las decisiones tácticas que tomas. Desde el monje curandero hasta el ranger veloz y la maestra de espadas, cada elección que hagas tendrá un impacto en el transcurso de la batalla.

El componente de deck building de Ash of Gods: The Way se impone rápidamente sobre el táctico, revelando la verdadera esencia del juego. Con cuatro mazos distintos, cada uno de los cuales ofrece su propia estrategia y desafíos, las posibilidades de personalización son infinitas.

Nuestra parte favorita es la posibilidad de mezclar los mazos para crear combinaciones únicas. Si combinas los puntos fuertes de diferentes facciones, podrás desarrollar estrategias aún más complejas e impredecibles, con las que cogerás desprevenidos a tus oponentes. Todo ello hace que The Way sea aún más cautivador si cabe.

Nos encanta esta libertad de personalización que ofrece a los jugadores la posibilidad de desarrollar su propio estilo de juego y de explorar distintos enfoques tácticos. Tanto si eres un estratega experimentado como un novato en el deck building, Ash of Gods: The Way te ofrece un terreno de juego rico en posibilidades y desafíos.

Nuestro consejo: familiarízate con los mazos. Tómate tu tiempo para explorar cada mazo y comprender sus puntos fuertes y débiles. Cada facción tiene su propio estilo de juego, así que encuentra el que mejor se adapte a tu estrategia.

Ash of Gods: The Way es ideal para los jugadores que disfrutan tanto con la estrategia profunda como con la narración inmersiva. Si te gustan los juegos de cartas, los RPG tácticos y las historias apasionantes, este es tu juego.